El amor en la poesía de Sor Juana.

El amor en la poesía de Sor Juana.

El avaro. El médico a palos. Las preciosas ridículas.

El avaro. El médico a palos. Las preciosas ridículas.

Electra. Medea. El Cíclope. Las troyanas

  • ISBN: 9786079250096
  • Derechos: Editorial Parmenia
  • Sello editorial: Reims ediciones
  • Año de publicación: 2015
  • Número de páginas: 124
  • Tamaño: 13.5 x 21cm.
  • Tipo: Libro
  • Idioma: castellano
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9786079250096
Las condiciones para que Eurípides destacara como autor trágico se debieron al profundo conocimiento que poseía de la mitología griega, cuyos personajes llevó a jugar en inteligentes piezas, respaldadas por la creación de sujetos de recio carácter, en los que logró una introspección a la que no llegaron sus colegas. Además, su genio le permitió reformar la estructura tradicional de la tragedia, aquella a que estaba acostumbrada la sociedad ateniense desde Esquilo, para dar a sus obras aires de renovación no vistos en su época. Las cuatro piezas aquí presentadas evidencian que Eurípides logró mostrar que había llegado al teatro para inclinar el gozne poético y que la razón en todo momento de la vida se manifiesta en la expresión sentimental y en el deseo personal, fundamentos ambos que darían más adelante pie a la novela.
En todas sus obras, Eurípides (480-406 a.n.e), que también actuaba dentro de ellas, envolvía un mito apenas entrevisto en el contexto trágico: para llegar a entender el mensaje social, había que definir los instrumentos del destino, las trampas del azar, los sentimientos, la justicia, el deber, la moral, la obligación, la costumbre, el respeto, los temores y la razón u odio del personaje, pero, tal como en la vida, el final tomaba por sorpresa: la inevitable muerte provocada por los errores humanos.
Las condiciones para que Eurípides destacara como autor trágico se debieron al profundo conocimiento que poseía de la mitología griega, cuyos personajes llevó a jugar en inteligentes piezas, respaldadas por la creación de sujetos de recio carácter, en los que logró una introspección a la que no llegaron sus colegas. Además, su genio le permitió reformar la estructura tradicional de la tragedia, aquella a que estaba acostumbrada la sociedad ateniense desde Esquilo, para dar a sus obras aires de renovación no vistos en su época. Las cuatro piezas aquí presentadas evidencian que Eurípides logró mostrar que había llegado al teatro para inclinar el gozne poético y que la razón en todo momento de la vida se manifiesta en la expresión sentimental y en el deseo personal, fundamentos ambos que darían más adelante pie a la novela.
Prólogo 7
Electra 9
Medea 47
El Cíclope 79
Las troyanas 99